Aseo a encamados

El aseo del paciente encamado es una tarea importante en el cuidado de personas mayores. Con un buen aseo general, se pueden evitar situaciones de riesgo como: infecciones, dolores, rigidez, picores, etc. Además, mejorarás la autoestima y calidad de vida del paciente, por lo que es una parte esencial de la rutina.

En Cuidado de Mayores de Madrid, ofrecemos nuestros servicios como empresa autorizada en el cuidado de personas. Nuestro amplio equipo de profesionales, están cualificados para el aseo del paciente encamado.

La importancia de un correcto aseo e higiene para personas dependientes

Mantener un correcto aseo e higiene es fundamental para todas las personas. Cuando hablamos de ello, nos referimos a todas aquellas tareas cotidianas como la ducha, el lavado de manos, la aplicación de productos específicos para la piel, manicura y pedicura, corte de pelo, etc. que contribuyen, no solo a gozar de buen aspecto, sino a algo mucho más importante, como es cuidar de nuestra salud.

Las personas en situación de dependencia no pueden llevar a cabo estas tareas por sí mismas. Además, debido a su condición, en ocasiones necesitan de un cuidado de la higiene más intensiva, como por ejemplo, cuando sufren problemas de incontinencia, lo que requiere de varias intervenciones a lo largo del día.

Por eso, es imprescindible, ante estas situaciones, contar con personal cualificado que pueda asistir todas las tareas relacionadas con el aseo del paciente.

Protocolo de aseo e higiene de encamados

Con el fin de que todas estas tareas relacionadas con la higiene de la persona encamada se realicen correctamente, existen una serie de protocolos que los cuidadores han de seguir. Se trata de una serie de pasos que se han de dar en orden para hacerlo todo correctamente.

Protocolo de aseo del paciente

1. Controlar el entorno con una temperatura adecuada. La persona debe estar en un lugar cómodo en el que la temperatura sea la adecuada, por lo que deben controlarse que no haga frío o haya corrientes de aire molestas.
2. Preparar el material necesario para la higiene del paciente, así como, esponjas jabonosas y agua templada para el aseo en cama.
3. El cuidador o cuidadora debe colocar al paciente en decúbito supino, para llevar a cabo la higiene del paciente encamado. Es fundamental conocer las maniobras de movilización de la persona dependiente, para hacerlas sin causarle incomodidad o daño.
4. Una vez que la postura del paciente en decúbito supino es correcta, se procede al aseo general del paciente encamado.
5. Para asear correctamente a personas encamadas, empezamos lavando la cara con agua y esponja. Secamos con ligeros toques.
6. Seguidamente, retiramos la ropa en la zona de arriba y lavamos orejas, cuello y hombros con esponja jabonosa bien escurrida. A continuación, manos, brazos, torso y abdomen, y también el pubis. Tapamos al paciente encamado con una toalla limpia.
7. Si es necesario para la higiene del paciente, se realiza un cambio de agua.
8. El aseo del paciente encamado continúa descendiendo desde ingles a las extremidades inferiores. Eliminando las células muertas de la piel.
9. Para el lavado genital del paciente encamado, ya sea hombre o mujer, el aseo del paciente se hará minuciosamente, con esponja jabonosa, abundante aclarado y secando totalmente la zona. En ambos casos, la esponja se desecha.
10. A continuación, colocamos al paciente en decúbito lateral, y procedemos al lavado de espalda, parte posterior del cuello, glúteos y región anal.
11. Una vez acabado el aseo general del paciente, se recogerá la ropa de cama sucia, y se procederá a colocar las sábanas limpias. Terminamos untando crema hidratante para estimular la circulación del paciente encamado, colocando ropa limpia, peinado y colonia.

Procedimiento de aseo del paciente para el cabello

Se realizará una vez por semana como mínimo, con el material necesario; guantes, toalla, peine, champú, lavacabezas, etc. Con las manos limpias y guantes, el procedimiento es el siguiente:

1. Retirar el cabecero de la cama, colocando al paciente encamado en decúbito supino con la cabeza en hiperextensión.
2. Retirar la ropa del paciente para dejar el torso al descubierto y colocar toalla.
3. Colocamos el lavacabezas y dos algodones en los oídos.
4. Rociamos agua sobre la cabeza y aplicamos el champú, masajeando el cuero cabelludo. Aclarar y repetir en caso necesario.
5. Una vez que el cabello esté libre de espuma, secamos con una toalla y con secador si fuera necesario.
6. Por último, peinamos y acomodamos al paciente encamado.

Hábitos de higiene importantes en el aseo del paciente encamado

Es importante recordar, que el aseo del paciente se debe hacer en el menor tiempo posible y con mucho cuidado.

Además, en el momento de aseo del paciente es necesario prestar atención muy especial a las zonas cubiertas, pues especialmente en épocas de calor, pueden sufrir las consecuencias de la humedad.

La boca, orejas y otros orificios corporales deben también ser atendidos y limpiados con cuidado. Es una tarea que han de realizar especialistas en geriatría o auxiliares de enfermería cualificados en pacientes encamados.

Además, durante el aseo del paciente, el cuidador deberá estar atento por si ve signos de lesiones cutáneas, habituales en personas que están encamadas, como las úlceras por presión. Cualquier signo que delate que puede existir algún problema debe ser comentado con el personal médico para que este establezca las pautas a seguir.

Desde Cuidado Mayores Madrid le podemos proporcionar personal especializado en este y otros tipos de cuidados relacionados con las personas mayores y en estado de dependencia. No dude en solicitarnos más información.